Nos entristece profundamente la p茅rdida de Hans Keulen, miembro de nuestra Junta Directiva y enlace europeo, que falleci贸 esta semana tras seis a帽os de lucha contra un cordoma.
Natural de los Pa铆ses Bajos, Hans era la fuerza motriz de la labor de la Fundaci贸n en Europa. Durante los 煤ltimos cuatro a帽os, trabaj贸 incansablemente para ayudar a docenas de pacientes con cordoma a encontrar la atenci贸n adecuada y organizar a la comunidad m茅dica europea para colaborar en la investigaci贸n y mejorar la atenci贸n prestada a los pacientes con cordoma. Quiz谩s lo m谩s notable es que Hans instig贸 el desarrollo de las primeras directrices consensuadas para el tratamiento del cordoma, que se publicaron a principios de este a帽o - un paso importante hacia la mejora y estandarizaci贸n de los cuidados que reciben los pacientes. Gracias a sus esfuerzos, Hans se convirti贸 en una de las voces m谩s conocidas y respetadas de la comunidad europea de defensa de los pacientes y, en los 煤ltimos a帽os, ha desempe帽ado un papel importante a la hora de llamar la atenci贸n de la comunidad m茅dica y los responsables pol铆ticos de Europa sobre las necesidades de los pacientes con c谩ncer poco com煤n.
Todos nosotros en la Fundaci贸n estamos asombrados de lo que fue capaz de lograr incluso cuando su salud era precaria. Es realmente la personificaci贸n de la perseverancia y fue un defensor extraordinariamente capaz de nuestra causa. Aunque le echaremos mucho de menos, sus esfuerzos han puesto en marcha un movimiento entre la comunidad de m茅dicos europeos que continuar谩. Y ha inspirado a la Fundaci贸n para que haga suyos sus importantes esfuerzos por servir a la comunidad del cordoma y mejorar la asistencia que se presta a los pacientes de cordoma en Europa y fuera de ella.
Por encima de todo, estamos agradecidos a Hans por inspirarnos con su impulso constante, su optimismo, su alegr铆a y su contagiosa sonrisa. Debemos seguir perseverando, y as铆 lo haremos, en su honor.